China: 7 cosas que puedes comer pinchadas en un palo y ni te imaginas

Que a los asiáticos les pirran los pinchos y las brochetas no es ningún secreto, y que los chinos no son una excepción a esta norma es algo que pudimos comprobar y saborear de primera mano durante nuestro recorrido por el gigante asiático.

En las calles de China puedes encontrar pinchos y brochetas de cualquier cosa que puedas imaginar.

China es un país en el que se hace mucha vida en la calle y a la gente le gusta comer lo que compra en los puestos callejeros. En este sentido, resulta muy cómodo que te den tu ración (de lo que sea) pinchada en un palo, para poder llevarla contigo y comerla incluso mientras caminas.


Algunas de estas brochetas pueden parecer más o menos convencionales, sin embargo otras resultan de lo más extravagantes. A continuación te dejamos una lista con todas las que pudimos probar durante nuestra estancia allí:

1 - Cordero.

Las de cordero son las brochetas más populares de China, o al menos esa fue nuestra impresión, pues las encontrábamos por todas partes, tanto es así que incluso una vez compramos un paquete de patatas fritas con sabor a brocheta de cordero (En China encuentras patatas fritas con los sabores más inimaginables).

Lo cierto es que estos pinchos nos gustaron tanto que tuvimos que preguntar a uno de los vendedores qué especias usaba para condimentarlas, y nos dijo que se trataba de una mezcla de diferentes tipos de pimienta y comino. Desde aquel día, cada vez que cocinamos cordero, lo hacemos con estas especias.

Brochetas de cordero, nuestras preferidas de todo el repertorio que pudimos probar.

2 - Patatas en espiral.

Las patatas en espiral son otro de los clásicos, y no sólo en China, pues también las hemos encontrado en más países asiáticos como Corea del Sur.

No es que sea extraño comer patatas fritas, pero sí que nos pareció curiosa su forma en espiral, aunque eso sí, teniendo en cuenta lo económico que es un producto como la patata, la verdad es que resultan un poco caras.

Probando una de las curiosas espirales de patata.

3 - Cangrejo y sepia rebozada.

Bichos a parte, las brochetas de cangrejo y sepia rebozada fueron las que más nos llamaron la atención, tanto por su aspecto como por su tamaño. Además, no están mal de precio.

Tuvimos la ocasión de probarlas en el bullicioso barrio musulmán de Xi'an y quedamos encantados, no os perdáis nuestro vídeo en YouTube.

Brocheta de sepia en el barrio musulmán de Xi'an. ¡Riquísima!

4 - Calamares.

Menos aparatosos que los de sepia, pero igualmente sabrosos y llamativos son los pinchos de calamar o chipirón (lo cierto es que nunca he sabido cual es la diferencia entre estas dos especies, si es que la hay...).

Paseando por Pingyao, una aldea tradicional muy bonita, encontramos un puesto donde vendían pinchos de esta clase y nos pusimos las botas cenando a base de calamares y cerveza (Tsingtao, por supuesto).

Brocheta de calamar y cerveza Tsingtao, una combinación perfecta.

5 - Escorpiones.

Metámonos ya de lleno en terreno pantanoso... Si lo que realmente te gusta son las emociones fuertes, entonces debes acudir al mercado nocturno de Wangfujing, en Pekín.

Aunque existen muchos otros lugares en China donde poder degustar estas "exquisiteces", nosotros decidimos ir a este animado mercado callejero con el firme propósito de comer alguna de las repelentes brochetas que aquí venden a precios nada económicos.

Sabíamos que se trata de una gran turistada y que pocos nativos en su sano juicio incluirían alguna de estas cosas en su dieta, pero la decisión estaba tomada desde hacía meses y no pensábamos echarnos atrás en el último momento.

Después de recorrer todos los puestos del mercadillo varias veces, terminamos conveniendo en que los pinchos menos asquerosos eran los de unos pequeños escorpiones que aún movían sus patitas momentos antes de ser cocinados.

Sobre la experiencia, he de decir que finalmente no fue tan desagradable como esperábamos y que esa textura crujiente hacía que mascar aquellos pobres animalitos no resultase tan repugnante como parecía al principio [ ver vídeo aquí ].

Estas son las brochetas que finalmente nos atrevimos a probar.

6 - Ciempiés, gusanos e incluso lagartos voladores.

La oferta del mercado de Wangfujing era realmente amplia y, a parte de los pequeños escorpiones que pudimos degustar, se podían encontrar otras cosas tan apetitosas como larvas, ciempiés o gusanos de todo tipo. 

De izquierda a derecha: Caballitos de mar, escorpiones y ciempiés.

También había algunas especialidades que, más que producir nauseas, lo que nos generaba era sorpresa, como los pinchos de lagartos voladores o caballitos y estrellas de mar. En definitiva, este mercado era un salón de los horrores culinarios en toda regla.

Lagartos voladores, estrellas de mar y algún que otro gusano. Lo que no se encuentre en el mercado de Wangfujing, no se encuentra en ninguna parte.

7 - Patitos

Nuestra última etapa en China era la macro-ciudad de Shanghai, y fue allí, mientras paseábamos por los jardines de Yuyuan donde nos encontramos con estás curiosas brochetas.

Lo que nos llamó la atención no fue el tipo de carne usada, pues ya habíamos comido pato en otras partes de China (y también en nuestro propio país), sino ver a los patitos enteros ensartados en un palo (con pico y todo).

Brochetas de pato en uno de los puestos callejeros cercanos al jardín de Yuyuan (Shanghai).

En conclusión, cuando muchas veces nos preguntan aquello de "¿Encontrasteis en China la misma comida que sirven en los restaurantes chinos de nuestro país?", creo que ya podemos responder con firmeza que no. ¿Os imagináis poder entrar a un restaurante chino en España y que te sirvan una suculenta ración de ciempiés?

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