Una panorámica de la localidad de Bérgamo. |
¿Por qué visitar Bérgamo?
A parte de tratarse de una ciudad con mucho encanto, Bérgamo reúne dos condicionantes que la convierten en el lugar perfecto para pasar unos días tranquilos en la región de Lombardía:
- Bien comunicada: Desde que Ryanair decidió convertir el Aeropuerto de Orio al Serio en una de sus principales bases en Italia, Bérgamo ha quedado en una situación privilegiada en lo que a rutas aéreas se refiere, y ahora mismo está perfectamente comunicada con el resto de Europa.
- Localización: Su situación a los pies de los Alpes, hace que esta pequeña ciudad lombarda sea la base perfecta para poder visitar otros importantes lugares de la zona, como Milán (50 km), Brescia (55 km), Monza (43 km) o el popular Lago de Como (70 km).
¿Qué ver en Bérgamo?
Lo primero que debes saber sobre Bérgamo es que está dividida en dos, la ciudad baja (città bassa), que es la parte moderna, y la ciudad alta (città alta), que es donde se encuentra el casco histórico rodeado por una muralla y donde vas a encontrar la mayoría de puntos de interés. Ambas “ciudades” están comunicadas por un funicular.
El funicular que une la parte alta con la baja. |
- Piazza Vecchia (La Plaza Vieja).
Sin duda, uno de los lugares más importantes es la Piazza Vecchia, que constituye el corazón de la Ciudad Alta de Bérgamo y es el punto ideal para iniciar la visita.
En esta misma plaza se puede ver la bonita Fontana dei Contarini de la época veneciana o el Palazzo della Ragione, que fue construido en el siglo XII y actualmente es considerado el ayuntamiento más antiguo del país.
También podrás escuchar el Campanone, que es la gran campana de la Torre Cívica que redobla hasta 100 veces cada noche (22:00).
- Piazza del Duomo (La plaza de la Catedral).
No muy lejos de la Piazza Vecchia nos encontramos con la Piazza del Duomo, donde a parte de la Catedral de Bérgamo, destacan otros edificios religiosos como la Basílica de Santa María la Mayor (una visita indispensable) o la Capilla Colleoni que en realidad se trata del mausoleo de Bartolomeo Colleoni, un mercenario italiano del siglo XV.
Una bonita perspectiva de la Plaza de la Catedral de Bérgamo. Foto: Aniek Rooderkerken. |
- San Virgilio.
Como toda ciudad con encanto que se precie, Bérgamo también tiene un punto elevado para poder disfrutar de las vistas, y en este caso se trata de la colina de San Virgilio, donde se encuentra un castillo amurallado que, aunque está en ruinas, no deja de ser una visita interesante.
Para llegar hasta San Virgilio podrás hacer uso de otro funicular que parte desde la Ciudad Alta y llega a la cima en pocos minutos.
- Cómo llegar.
Si aterrizas en el aeropuerto de Bérgamo (Orio al Serio), la conexión con el centro de la ciudad es realmente fácil, cómoda y rápida.
La línea 1 de la ATB (Agencia de transporte de Bérgamo) dispone de un autobús que sale cada 20 minutos y comunica el aeropuerto con diferentes puntos de la ciudad.
Hay diferentes modalidades de ticket, que van desde los 2,30€ del billete sencillo a los 7€ del pase de 72 horas. Para disponer de la información más actualizada, recomendamos echar un vistazo a la web oficial de transporte.
Recorrido de la línea 1, que comunica el aeropuerto con la ciudad de Bérgamo. |
Gastronomía.
Subir y bajar las cuestas de la Ciudad Alta nos va a abrir el apetito, y qué mejor manera de saciarlo que con algunas de las especialidades de la zona:
- Casoncelli alla Bergamasca: Seguramente el plato estrella de la gastronomía de Bérgamo, se trata de unos ravioli rellenos de carne, salami, peras y uvas pasas. Una auténtica delicia que te puedes perder.
- Polenta: Es una torta salada que se lleva mucho por la zona y tiene diferentes variantes dependiendo de qué esté hecha (maíz o trigo).
- Y de postre, la Polenta e Osei, el dulce más famoso de la ciudad, hecho a base de crema de chocolate y mantequilla y recubierto por una capa de mazapán amarillo.
Aunque la gran mayoría de puntos de interés de Bérgamo se situan en la Città Alta, recomendamos hospedarse en la parte baja, pues los precios son más bajos y se puede llegar a la parte alta con un agradable paseo.
Tras barajar varias opciones en esta parte de la ciudad, fialmente nos decidimos por el Prenditempo, un hotel con habitaciones bastante ámplias, muy bien acondicionadas y con entrada independiente desde la calle. La ubicación nos pareció muy buena, pues se encuentra a 10 minutos del funicular que te sube a la Città Alta y a otros tantos de la estación, algo muy importante teniendo en cuenta que en los siguientes días íbamos a coger trenes para visitar las ciudades de Brescia y Verona.
En este plano puedes ver la localización de éste y otros hoteles de esta zona de la ciudad:
Booking.com
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